RESERVA PROVINCIAL ISLA DE LOS PÁJAROS

UBICACIÓN: Noreste de la Provincia de Chubut, al suroeste del Golfo San José, sobre el Istmo Carlos Ameghino de la Península Valdés, a 800 metros de la costa, Dpto. Florentino Ameghino.

HISTORIA-ANTECEDENTES DE SU CREACIÓN: La Reserva Isla de los Pájaros ampara un lugar histórico. Allí existía el Fuerte San José, fundado por Juan De la Piedra durante su expedición por las costas patagónicas, en 1779, para reafirmar el dominio español sobre esas tierras. El Fuerte repetidamente atacado por los indios, es finalmente arrasado el 7 de Agosto de 1810.

FUNDAMENTOS DE SU CREACIÓN: Proteger las numerosas colonias de aves marinas y costeras que utilizan la isla para nidificar.

DESCRIPCIÓN GENERAL: El paisaje que recibe al visitante está dominado por una vegetación escasa que apenas cubre los suelos arenosos; sobre el mar, las costas presentan suaves declives que se intercalan con acantilados. La Isla de los Pájaros se encuentra en aguas del Golfo San José , que aparenta una gigantesca laguna marina, de tranquilas aguas y amplias mareas (llegan a tener 12 metros de altura, de diferencia entre pleamar y bajamar). Este fenómeno natural hace que la isla, distante 800 metros de la costa, se comunique con la tierra firme dos veces al día . A medida que desciende el nivel del agua, va quedando expuesto el lecho marino, que forma un estrecho pasaje. Aunque antiguamente por esta vía se permitía el acceso del visitante a la isla, actualmente el mismo está prohibido, dado los destrozos y la gran perturbación que esto significa para las aves que allí nidifican. El sector que queda descubierto pone al alcance del observador el fantástico y asombroso mundo del fondo marino. Sobre las restingas, en pequeñas piletas naturales, quedan a la vista un sinnúmero de organismos acuáticos (pececillos, pulpos, cangrejos, anémonas, estrellas de mar, infinidad de algas, etc.) que continúan su vida normalmente. También se observan, sobre la línea de pleamar, las gigantescas y larguísimas masas verde bronceado de la mayor alga costera: el Cachiyuyo, arrancadas de las profundidades por fuertes tormentas. Pero es sobre la isla donde transcurre la vida de los seres que motivaron la creación de esta Reserva: las aves. Sobre sus 170 metros de largo por 75 de ancho, millares de aves nidifican todos los años, principalmente Gaviotas Cocineras, Biguáes y Gaviotines. El increíble bullicio producido por sus voces, se escucha nítidamente desde la costa. Gracias a los potentes largavistas ubicados en estratégicos puestos de observación, se puede apreciar su vuelos, cortejos aéreos y las diferentes etapas de su ciclo vital. BIOMA: Litoral Atlántico Patagónico y Estepa Patagónica.

PROBLEMAS DE CONSERVACIÓN: Afortunadamente, y gracias a su natural inaccesibilidad, la vida silvestre de la Isla de los Pájaros se mantuvo a salvo durante mucho tiempo. Pero, antes de la creación de la Reserva, algunos de los escasos pobladores de la zona, accedían a la isla durante la bajamar para recoger los huevos (y a veces también los pichones) de las aves marinas que allí nidifican. Estos eran utilizados como complemento en la dieta, dada la gran distancia que entonces los separaba de los centros poblados. Posteriormente, una vez creada la Reserva y difundido el valor biológico del área, la isla era visitada hasta el año 1975 tanto por investigadores como por curiosos. Estas intromisiones humanas resultaban tan perjudiciales como la depredación directa. La sola presencia de una persona provoca un disturbio tal en las colonias de nidificación que las aves, en su afán de escapar y defender sus territorios y crías, se hieren y agreden entre sí, resultando dañados nidos y huevos. Muchas parejas llegan a abandonar sus nidadas y pichones, dejándolos a merced de los predadores que constantemente rondan las colonias. A pesar del efectivo control de los Guardafaunas y de la prohibición actual de acceso a la isla, algunos visitantes desaprensivos o desinformados, ingresan o se acercan demasiado a la misma, a veces acompañados de sus mascotas (perros), con las previsibles negativas consecuencias sobre las colonias de nidificación.

YACIMIENTOS ARQUEOLÓGICOS/PALEONTOLÓGICOS: Sobre los sectores altos, ubicados en la Estepa Patagónica, se encuentran numerosas evidencias de las poblaciones indígenas que habitaron la región. Los llamados "picaderos", donde se trabajaban las rocas para confeccionar puntas de flecha, raspadores, etc. se destacan por la gran cantidad de pequeños restos de roca, de bordes irregulares y agudos. Recuerde que no debe recoger ningún elemento en estos sitios de gran valor cultural. Su intervención estaría entorpeciendo el trabajo de los especialistas. Si se observan con detenimiento los acantilados y las restingas, podrán observarse una gran cantidad de restos fósiles de animales marinos como mejillones, ostras, vieiras, cangrejos, caracoles, etc.